Una instalación solar consta de varios componentes para un correcto y funcional funcionamiento.
Partes de una instalación solar:
- Paneles fotovoltaicos: encargados de generar energía eléctrica a partir de la luz incidente.
- Inversor o microinversor: adapta la corriente continua de las placas a la corriente alterna que se usa para el funcionamiento de los equipos eléctricos de la vivienda. Hay diferentes tipos de inversores y diferentes formas de instalarlos. La elección de uno u otro depende de muchos factores como la cubierta, el tipo de consumo…
- Optimizadores: son componentes situados entre los módulos y el inversos. Los optimizadores se encargan de llevar a los módulos y a los inversores a su máxima potencia para el mejor rendimiento.
- Estructura sobre la que se monta la instalación: la estructura donde se fijan los paneles existen dos tipos los coplanares que se utilizan cuando los paneles van pegados a la cubierta y la estructura triangular que corrigen la inclinación y la orientación para la optimización de la instalación.
- Baterías: se usan para mejorar la eficiencia de su instalación o porque el consumo suele ser nocturno.
- Protecciones: hay diferentes protecciones como magnetotérmicos de continua, fusibles de continua, fusiles mega, descargadores de sobretensión…
El mantenimiento de las placas consiste en una revisión anual la cual consiste en la revisión del estado de las placas, limpiarlas y comprobar que sigue produciendo la energía inicial.
Apuesta por la energía renovable
Fessa trabaja en exclusiva en energías renovables para proporcionar una energía limpia y sostenible.
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